La cáscara de nuez se desarrolla y produce con un material filtrante liviano destinado al tratamiento de aguas residuales aceitosas. La materia prima se basa en una cáscara de nuez gruesa de calidad superior, producida mediante desengrasado, triturado, pulido, digestión termofílica y muchas veces cribado. Es de color marrón amarillento, no se pudre, no tiene mancha y tiene alta tenacidad.